sábado, 22 de noviembre de 2008

SIMBOLO


CÍRCULO


Merodear 
el Objeto Central
por el que se origina, 
desencadena,
nuestra rutina.
Rodearlo, 
vigilarlo,
que nos reconozca al acercarnos,
que sea como uno de nuestros brazos,
pero nunca atravesarlo
(brazo herido),
y que desentrañe hasta lastimar,
para que el misterio de estar en las orillas
no se deshaga mar adentro;
para que no haya palabra
capaz de clausurar
la trama inabarcable
de los días y las noches.


1 comentario:

AnNa dijo...

Mi vida, qué lindos poemas que escribiste en estos días. Perdón por haber estado tan llena de cosas y no haberle prestado atención a tu blog.

El que más me gustó, el de Kierkegaard. Acaso por tantos recuerdos desde nuestras conversaciones iniciáticas.

Otro muy bueno, el que habla del Spin de Baudelaire. Me parece que usás palabras hiper acertadas.

Siento que tengo a mi lado un gran talentoso, nunca dejes de darle curso a este "gift" silencioso y a la vez imposible de acallar que Dios te ha dado.
Te amo.